Voy a leer poemas nuevos. Vengan!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Hoy, Ciclo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Se cortó la luz el martes pasado en Libario y no pudimos hacer el Ciclo. Garrón. Pero atenti que se reprograma y en breve volvemos. Gracias a todos los que vinieron por ponerle onda a pesar de la no-luz.

En la Revista de Cultura - OFF, publicaron un poema mío...y está traducido al italiano.

Léanlo acá
Revista de Cultura OFF

¡Ufff! va a estar buenísimo

POESIA-CICLO/ CICLO DE POESIA Y MUSICA CELEBRA UN AÑO Buenos Aires, 15 de mayo (Télam).- El ciclo de poesía y música "Ah! Um... dijo un sapito!" que se celebra el tercer martes de cada mes en el espacio de arte Libario, cumple un año de vida con la intención de difundir la obra de jóvenes poetas que no participan del circuito de lecturas o que no han sido editados, junto a autores reconocidos y ya publicados. A mediados de abril del 2008, comenzó a funcionar el ciclo organizado por el colectivo de poetas 7 Grados, quienes se propusieron abrir el espacio a una de las vetas a veces más rezagadas de la literatura, con la lectura de textos junto a músicos invitados en vivo. Por el ciclo, ya pasaron los escritores Osvaldo Bossi, Daniel Durand, Juan Desiderio, Belén Ianuzzi, Félix Bruzzone, Pedro Mairal, Mercedes Halfon, junto a los músicos Rosal, Trebian, Sietecielos, Como un Jardín y Mauro Conforti, entre muchos otros. "El balance después de más de un año es totalmente positivo. Principalmente porque nos divertimos haciéndolo, más allá del laburo que implica y las complicaciones que hemos ido sorteando a lo largo de este tiempo", contó a Télam Lucas Balducci, integrante del colectivo 7 Grados, junto a Gerardo David Cristante, Jorge Huarte, Jimena Repetto, Ana Laura Rivara y Diego Suárez. "Organizamos un ciclo porque nos divierte hacerlo. Somos buenos anfitriones, nos gusta que la gente venga a nuestra casa, que es un poco en lo que se ha convertido Libario para nosotros; nos gusta beber, charlar, fumar, contar anécdotas, escuchar buena poesía y música. Y eso es lo que intentamos que suceda una vez por mes", dispara Balducci. Los organizadores hacen hincapié en la idea de "invitar a poetas que en general no participan del circuito de lecturas, que no han sido editados y hasta en algún caso, poetas que han hecho su presentación al público en Libario, junto a otros poetas que sí lo hacen y que tienen ya varios libros editados. Habla un poco de lo que queremos transmitir".
El colectivo 7 Grados -que nació para dar forma a este ciclo- surgió de conversaciones entre sus integrantes, sobre la "teoría de los seis grados de separación", que dice que cualquier persona en la Tierra puede estar conectado a otra a través de una cadena de conocidos que no tiene más de cinco intermediarios. "Nosotros nos tomamos una pequeña licencia y subimos la cantidad a siete, con la idea de que esto irá creciendo y contagiará el virus poético a toda la gente", contó Balducci. El próximo encuentro será el martes a las 21 en Julián Alvarez 1315, con la lectura de textos a cargo de Inés de Mendoca, Noelia Vera, Griselda García, Juan Pablo Lavagnino, Flavia Antiocci, Ana Laura Rivara y Jorge Ignacio Huarte junto a los músicos Juan Jacinto y La Todo Mal Orquesta, con entrada gratis. (Télam).- mme-jag

Hay Ciclo, hay poesía, hay música!

Martes 21 de abril

Libario bar

Florida

El vitreaux y los caracteres chinos
se caen a pedazos.
Tengo cálculos en la garganta.
Siempre supe
lo que dura
estar arriba, en las alturas.
Fumo un último cigarro
sentado en la cornisa del mundo
antes que se derrita
como el hielo
de mi bebida.

Afterfiesta

Se fue la noche
me quede quieto
sentado en un sillón.
Esperé a que alguien me viniese
a rescatar.
Esperé.
Las marcas de los besos
quedaron pegadas a la pared.
Ahora no hay un solo ruido,
ahora no hay nadie que baile
ahora el hielo de mi gin tonic
está derretido
ahora no se escucha sonar a Talking Heads
ahora sería bueno poder dormir
ahora que me duelen los dientes.
Ahora pienso en que podría
haber dicho cosas inteligentes
ahora pienso en que podría haber dicho algo.
Es de día
no hay nadie
en la calle
en el departamento
no se escucha nada
salvo ese pequeño zumbido
detrás del oído
que anticipa
la sordera.